Cómo se prepara la marca de calzado más famosa del país para sobrevivir al 2025

Fuente: iProfesional – «Cautela» es la palabra elegida para definir el plan de negocios de la compañía para enfrentar los ajustes económicos que continúen durante este año
A finales del 2023, la marca más tradicional de calzado de la Argentina sufría en sus negocios la «gran» fragilidad microeconómica local, sumada al incierto escenario político que se evidenciaba para las elecciones presidenciales del 2024.
Se trata de Grimoldi, que dos años atrás transitaba por problemas comerciales y financieros derivados de diversas medidas adoptadas por el entonces gobierno de Alberto Fernández como las regulaciones de precios o las trabas en el acceso a divisas para pagos al exterior.
Dichas decisiones de la gestión kirchnerista terminaron por reducir su rentabilidad operativa, obligando a su directorio a tomar medidas cautas a la hora de analizar el presupuesto de negocios para el 2024.
La estrategia la llevó, por ejemplo, a cancelar su deuda financiera para evitar que el continuo aumento de tasas de interés afectara negativamente su resultado como en otras épocas.
También desarrolló colecciones segmentadas para satisfacer las necesidades cambiantes del público; mantuvo la esencia de sus locales; creció en la venta directa al consumidor, y continuó con el posicionamiento de las marcas que comercializa.
El plan de negocios de Grimoldi para sobrevivir este año
Sin embargo, sus operaciones acompañaron la actividad y el consumo que sufrieron una caída importante luego del desembarco del gobierno libertario, debido a las políticas económicas establecidas por el presidente Javier Milei no lograron un cambio drástico en las condiciones del país.
Por eso, sus ejecutivos mantuvieron los lineamientos de su plan para sobrevivir a este escenario, cuidando su flujo de caja, incentivando la venta online, negociando plazos de pago, tanto con proveedores como con clientes, evaluando exhaustivamente compras e inventarios de mercadería y adaptando su sourcing rápidamente en base a competitividad, carga impositiva y las expectativas de consumo.
Ocurre que el freno que se dio en el consumo de indumentaria y calzado afectó las ventas y la rentabilidad de la compañía.
Para este año, en la empresa se muestran atentos a las consecuencias que el cambio de ideología que desembarcó en la Casa Rosada permita tomar un nuevo rumbo económico, tras haberse votado o definido políticas que modificarán forma de hacer negocios en el país si estas persisten en el tiempo.
La popular marca de calzado, afectada por el clima electoral
Este panorama quedó plasmado en un documento enviado por Grimoldi a la Comisión Nacional de Valores (CNV), para informar sobre los resultados de su balance correspondiente al año pasado.
En el informe, el directorio de la compañía destaca «las reformas que desregulan y facilitan el comercio, incentivan a las empresas a actuar de forma veloz y eficiente para posicionarse ante el nuevo panorama».
El paper advierte además sobre la necesidad de mantener la cautela de cara a las elecciones de medio término de octubre próximo en la mayoría de las provincias y que, según los ejecutivos de la empresa, podrán corroborar o no e nuevo rumbo elegido.
A su vez, y al depender en parte de las importaciones de varios de sus productos, el panorama internacional también es tenido en cuenta por quienes tienen a su cargo la planificación operativa de Grimoldi.
Se detalla que el escenario sigue siendo afectado por los conflictos en Ucrania, la franja de Gaza y en Siria, sumado a la política económica actual de los Estados Unidos, con tasas altas y aumento de tarifas de importación.
En la empresa entienden que estas medidas incrementan los costos y generan problemas de logística en la industria en la cual compite Grimoldi.
Consumidor selectivo
«Por eso nos sigue siendo muy difícil proyectar los próximos meses», se sinceran sus ejecutivos en el documento, en el cual adelantan que «la compañía será precavida en sus planes».
Es decir, mantendrán el rumbo elegido en el 2023 para desarrollar colecciones segmentadas, que satisfagan las necesidades cambiantes del público que percibe un incremento en su poder adquisitivo, pero considera que Argentina es cara en el rubro indumentaria.
Del mismo modo, sostendrá la esencia de sus locales y las marcas que comercializa previendo que el consumidor seguirá siendo selectivo y buscará productos con buena relación precio-calidad y marcas que le generen confianza.
Actualmente, la actividad principal del grupo Grimoldi es la comercialización de calzado, accesorios e indumentaria a través de locales de terceros, locales propios, franquicias y por internet.
Estos productos son adquiridos a fábricas nacionales e internacionales o fabricados en su propia planta de Arroyo Seco, Santa Fe, en la que fabrica una parte de lo que comercializa. Adicionalmente, tiene una planta productora de fondos y plantillas para calzado instalada en Pilar.
«Estamos convencidos que, con las medidas implementadas, más el acompañamiento de todos los mencionados, se han sentado las bases para una compañía más sana y con mayor rentabilidad», se destaca en el documento enviado a la CNV.
Mayores ganancias
En cuanto a su performance durante el 2024, el paper admite que el consumo de productos como los que comercializa la compañía «empezó muy flojo, forzando a profundizar las liquidaciones, evitar aumentos de precios, reducir márgenes de utilidad y ser más eficiente en la operatoria».
Se resalta la fuerte caída de las ventas durante los primeros seis meses del 2024 por la pérdida de poder adquisitivo, que llevó a los clientes a optar por una compra basada en el precio, las promociones y las cuotas.
Sin embargo, durante el último trimestre del año pasado, desde Grimoldi notaron una leve recuperación y una mayor decisión de compra.
En ese contexto, el directorio siguió con la cautela, incentivando las ventas online, cuidando el flujo de caja, negociando plazos de pago cortos, tanto con proveedores como con clientes, adaptando su sourcing en base a las nuevas de reglas de comercio exterior y evaluando constante y exhaustivamente los inventarios de mercadería.
En volumen, la suma de las unidades vendidas por todos sus canales en el 2024, fue de 2.143.000 pares, marcando una caída de 1,8% respecto a los 2.182.000 de pares vendidos en el 2023, pero un crecimiento del 7,1% frente al 2022.
Para la empresa, la caída se genera principalmente en la venta a franquicias, aunque también cayó el consumo en los locales de Factory outlet, mientras que los volúmenes se mantuvieron o crecieron muy poco en los canales más importantes que son el de venta mayorista y el canal Retail (locales de primera y plataformas de eCommerce).
En este escenario, el canal llamado DTC (direct to consumer) representó el 60% del volumen vendido por Grimoldi, cuando en el 2023 había sido de 58%, y en el 2022 del 50%.
En pesos, las ventas consolidadas, ajustadas por inflación, alcanzaron los $220.596 millones, lo que representa una caída del 10,5% respecto al 2023.
En tanto, su margen de ganancia bruta consolidado cayó 4,4 puntos porcentuales a 54,5%, por el crecimiento de los costos de la mercadería vendida por sobre la variación de precios.
Menores tasas
Con relación a los gastos de comercialización pasaron a representar el 28,3% de la venta frente al 26,4% del mismo periodo del año anterior, como consecuencia de una suba de la participación de volumen de venta de las sucursales frente a la de mayorista.
También, aunque en menor medida, se vio afectada por la recomposición de gastos de ocupación, impuestos, tarifas, salarios y otros gastos que superaron el crecimiento de la inflación y de la venta, a pesar del control estricto llevado a cabo por la compañía.
A partir de estos datos, Grimoldi informó una ganancia operativa que cayó al 22,7% de la venta frente al casi 30% del 2023, con resultados financieros que totalizaron $30.146 millones, un 53 % menos que en el 2023.
Igualmente, la empresa pudo financiarse a tasas de interés menores, por ejemplo para sostener las ventas en cuotas, además de haber obtenido mayores ingresos con el manejo de sus excedentes de caja.
Es así como su rentabilidad en el 2024, ajustada por inflación, fue de $11.459 millones que representa el 5,2% de la venta y marca un crecimiento de 121% frente a la ganancia de $5.191 millones del mismo periodo del año anterior.
Pero, a pesar de esta mejoría en su rentabilidad, Grimoldi abrió un proceso de retiros voluntarios para achicar la planta de personal de su establecimiento de Arroyo Seco.
La fábrica es considerada clave en la actual estructura de abastecimiento pero sus ejecutivos entienden que debe mejorar aún más su productividad para poder competir con las importaciones. «Se seguirá invirtiendo en mejoras de máquinas, procesos y layout para lograr dicho objetivo», señala el documento en el cual también se hace mención a los planes para la otra planta de Grimoldi.
Es decir, para la fábrica Inyectora de poliuretano y goma eva ubicada en la localidad bonaerense de Pilar, donde hoy produce no solo plantillas o fondos, sino también productos terminados como sandalias y calzado de seguridad.
«El establecimiento deberá incrementar su productividad para concretar el ambicioso plan en el 2025, teniendo en cuenta la mayor competitividad que enfrentará», detalla el informe.
En el caso del Centro de Distribución de mercadería, también ubicado en Pilar, eñ directorio de Grimoldi entiende que «continúa funcionando de forma eficiente y productiva».
Complejo escenario
De todos modos, la empresa está llevando a cabo un plan para repensar el sitio «constantemente para mejorar los procesos que conlleva el crecimiento de la venta on-line y el manejo coordinado que requiere la omnicanalidad».
Si bien, sus ejecutivos son optimistas con relación a un repunte de la actividad durante este año, advierten que el abastecimiento seguirá siendo complejo y presentará importantes desafíos «que la compañía ya ha vivido y superado en momentos similares».
Por ese motivo, anticipan que aplicarán medidas para adaptarse a las nuevas reglas del comercio exterior y potenciales desregulaciones que faciliten y eficienticen la producción local, «teniendo en cuenta que la compañía está mejor preparada que en otras épocas para enfrentar los ajustes económicos que seguramente continúen durante el 2025».
En esa dirección, la empresa seguirá tomando decisiones conservadoras y llevando adelante medidas que fortalezcan su situación económico-financiera aún más.
Por eso, mantendrá cortos los plazos de cobranza, negociará esquemas de pago a mediano y largo plazo con proveedores, rotará el inventario apropiadamente y priorizará negocios rentables.