Fuente: Ecos365 ~ @shelosophy.ar ~ En el año 2006, Luciana Fortuna dio un gran paso cuando decidió poner en stand by su carrera como traductora de inglés para meterse de lleno en un nuevo emprendimiento. Así nació Shelosophy, su propia marca de zapatos con la que inauguró un local en Villa Constitución, ciudad de la que es oriunda, y con la que hoy exporta una gran parte de sus modelos a países de Latinoamérica.
«Al principio abrí la tienda con otro nombre y con un modelo de negocio distinto al actual ya que nos dedicábamos a revender zapatos que eran fabricados por terceros, pero de a poco yo me fui involucrando en el proceso de diseño y a meterme cada vez más en este rubro. Hoy, yo diseño cada colección y tercerizo su fabricación en los mismos talleres a los que les compraba antes», explicó Fortuna a Ecos365.
La joven villense contó que aun habiendo cursado sus estudios para volverse traductora de inglés, siempre se había sentido inclinada por el mundo del calzado y la moda, lo que la llevó a trabajar un tiempo como asesora de imagen. Estos inicios fueron el puntapié para animarse a cumplir su sueño de tener un negocio propio aunque sin imaginar todo lo que llegaría después.
Luego de algunos años vendiendo en Santa Fe, tomó el desafío de trascender las fronteras de una cuidad de tan solo 60 mil habitantes para conquistas nuevos clientes. En el 2015 sintió que había tocado techo con su local y que si quería ampliar su público debía llegar a otras zonas del país, fue por esto que comenzó a adentrarse en el mundo del e-commerce.
Ya con una tienda online propia y con un stock de zapatos con diseños de su autoría, se dedicó a hacer un rebranding de la marca y a finales del 2017 lanzó Shilosophy, con la cual empezó a comercializar a todo el país. Según la emprendedora, las ventas en ese entonces superaron sus expectativas, vendiendo entre dos y tres pares por semana.
«Empezamos desde el minuto cero teniendo envíos a todas partes de Argentina, aunque nuestra zona de mayor influencia era Buenos Aires, Rosario, Córdoba. Lo hicimos siempre por Tienda Nube, una plataforma flexible que nos permitía hacer un mapeo de cada lugar. La verdad, no sabíamos si la gente se iba a atrever a comprar zapatos por internet, nos sorprendió la respuesta y seguimos para adelante», consideró Fortuna.
De Argentina al exterior
La emprendedora señaló que la posibilidad de exportar surgió el año pasado, a partir de su vínculo con una persona de Chile que le permitió acceder al mercado de dicho país. Allí inauguraron una tienda online propia y un centro de distribución para facilitar la compra y el envío de zapatos.
«Tenemos una persona en Chile que se encarga de toda la logística de los productos y gracias a este centro de distribución los chilenos que nos compran pueden recibir los distintos modelos pagando un envío súper barato. Además, hacemos encomiendas a otros países como Perú y Uruguay a través de nuestro e-commerce en el país», explicó Fortuna.
Luciana no está sola ya que hoy son ocho personas trabajando en su pequeña empresa, entre las cuales se encuentra su marido, quien ocupa el rol de Gerente de Ventas y su hermano, quien se desempeña como asesor de Marketing, más otras personas en el área de atención al cliente, procesamiento de corres e internacional.
A futuro, la idea de Fortuna es seguir afianzándose en Chile y poder llegar con sus productos a nuevos mercados. Además, se refirió a la crisis que atraviesa Argentina y a la necesidad de salir adelante. «Me preocupa mucho la situación actual, sobre todo porque afecta a la cadena de fabricación donde te encontrás con aumentos de materiales y otros problemas que tratamos de surfear cada día», sostuvo.