Fuente: Enfoque Misiones ~ La producción de calzados en los primeros once meses de 2021 mostró una importante recuperación del 55,4%, de la mano de una mayor demanda doméstica que creció 51,8% y la sustitución de importaciones, de acuerdo con el reporte de la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES).
Entre enero y noviembre del año pasado, la producción logró mostrar una recuperación del 55,4% anual, para llegar a un total de 101.000 millones de pares, frente a lo que habían sido los 65.000 millones de un año atrás.
De esta manera, se espera que la producción total de calzado durante 2021 haya finalizado con una expansión del 64,3% respecto a 2020 llegando a un nivel de 115 millones de pares anuales, el mayor desde 2015 a la fecha.
«La mayor protección arancelaria por parte del Gobierno, sumado a la escasez de divisas para la importaciones de bienes finales fueron algunos de los motivos que impulsaron la producción hacia arriba», explicó el trabajo.
Durante 2021, el consumo aparente de calzados totalizó 121 millones de pares, lo que implicó un fuerte incremento del 51,8% respecto a los 79,8 millones de pares del año 2020.
La participación de las importaciones en el consumo aparente descendieron hasta un 17,1% entre enero y noviembre, por debajo de igual período del año anterior, cuando habían sido del 18,8%.
Ello puede explicarse por las mayores restricciones a la importación de calzados y el impulso a la sustitución de las mismas con producción doméstica.
Luego de cinco años de caídas consecutivas, el consumo por habitante logró marcar un fuerte repunte durante 2021.
De esta manera, alcanzó las 2,9 unidades por persona, con una recuperación del 50,1% , retornando a los niveles que se habían observado durante el año 2018, aún con camino por recorrer si se quiere volver a los niveles de 2015.
En 2021, las exportaciones de calzado alcanzaron los US$ 8 millones y mostraron una importante recuperación del 100% respecto a los US$ 4 millones de 2020.
Con respecto a las compras externas, estas también mostraron una recuperación tanto en valores como en cantidades, aunque perdieron participación en el consumo interno, y alcanzaron los US$ 308 millones con una recuperación del 18,2% respecto a los US$ 260 millones de igual período de 2020.
El saldo comercial fue negativo en US$ 299 millones y resultó en un deterioro del 17%.