Nelson Graells: el líder rosarino en el negocio de la ropa deportiva

Fuente: La Capital ~ Hablar con Nelson Graells es descubrir la historia de la venta de indumentaria deportiva en Rosario. Es muy interesante porque recuerda cada hito, cada momento crucial de las grandes marcas deportivas nacionales e internacionales. Se acuerda del día que llegaron las primeras Nike a Rosario, vivió el inicio de las ventas de camisetas del seleccionado tras el mundial 78, conoce de primera mano lo difícil que era comercializar Adidas por su alto costo y recuerda incluso cuando el tenista Guillermo Vilas puso de moda las Topper. De buena memoria, Graells cuenta en esta entrevista con Negocios el camino de lo que fue fundar una marca en un discreto local de la galería Dominicis hasta hoy sostener un grupo con 40 locales en Argentina. Y habla, por supuesto, de los desafíos actuales, las tendencias, la tecnología, la necesidad de evolucionar siempre junto a sus hijos, Lucas y Ramiro.

Pero vamos al comienzo. La primera marca que trajo Graells a Rosario fue Topper. Él había abierto su primer local en 1972 y fue en 1975 cuando la fábrica Alpargatas, que también fabricaba Flecha, decidió ir por un mercado más premium e ideó Topper. Nelson recuerda que “Alpargatas era una industria argentina muy fuerte, que se dedicó a muchos rubros y lanzó Topper justo cuando Guillermo Vilas las promocionaba y llegó al top ten mundial”. Ahí comenzó el furor por las zapatillas de lona y Sport 78 las vendía como pan caliente. Pero otro de los hitos que hicieron que él confiara en apostar al rubro fue que muy pocos años después llegó el mundial de fútbol de 1978 y la venta de camisetas fue exponencial. “Realmente Vilas y el mundial llevaron al negocio del deporte a un nivel de ventas mucho más importante”, asegura.

El crecimiento de Graells estuvo muy ligado a la venta de camisetas, desde el mundial del 78.

Así, Sport 78 crecía en ventas y en locales, hasta que fue Nike el que le trajo el siguiente salto. Eran los años 90 y la marca americana nacida en Oregon lanzaba la nueva tecnología para el calzado, aquellas zapatillas con aire que no habían sido probadas nunca antes. Quienes recuerdan esas épocas sabrán que no importaba el costo porque la diferencia entre un calzado estándar y uno con tecnología era asombrosa. “Fue una revolución, venían de todos lados a comprarlas”, dice. En esa época Graells logró la exclusividad de ese producto porque era también Alpargatas la que tenía la distribución y le dieron los 7 modelos con tecnología para que comercializara. Tiempo después, pudo vender la histórica marca Adidas, de fabricación alemana, que también comenzó con el uso de tecnología. Graells agrega un dato curioso de los alemanes “los fabricantes de Adidas eran dos hermanos, se pelearon entre sí y uno siguió con la marca y el otro creó Puma. Claramente a los dos les fue muy bien”.

De las zapatillas a la indumentaria urbana

El tercer gran salto del negocio, que terminó de consolidarlo, llegó con el estreno del año 2000. Fue allí cuando las marcas pasaron de fabricar ropa estrictamente deportiva, como las camisetas de cada deporte, a fabricar indumentaria urbana para todos los días y para quienes no hacen deportes también. Allí ya no sólo crecieron en ventas, sino que también en metros cuadrados. Así, el equipo que comanda Graells empezó a necesitar locales grandes, de entre 400 y 500 metros cuadrados para mostrar todo su stock.

Hoy la diversificación es la clave para atraer a todos los targets, ya que tienen distintas unidades de negocios: por un lado el local insignia, Sport 78, también los outlet, luego los exclusivos de Nike y Adidas, además para un target alto con ediciones limitadas está Dionysos, tienen también Team Sport y los locales de Blast con indumentaria más de tendencias y Fluid más dedicado a deportes alternativos. En total, emplea a 650 personas entre los locales de Rosario y los que tienen en Buenos Aires, Baradero, Casilda, Firmat y Villa Constitución. Y otro gran canal de ventas es la página web, Digital Sport, desde donde pueden atender a todo el país. La novedad de este 2023, que ya fue contada en Negocios, es que llegan con un amplio espacio a La Favorita, y también remodelaron Fluid en el Alto Rosario, así como el Team Sport del Libertad.

En lo que respecta a la producción, claramente el gran caudal de lo que venden no es de producción propia, pero sí desarrollaron cuatro marcas que las usan estratégicamente para abastecer el mercado en los momentos que cae la importación. De esta forma, para Fluid son fabricantes de las marcas Fidji y Lala y para Sport 78 producen la marca Cross Creek y 78.

Con 40 locales propios, el grupo que lidera Nelson Graells da respuesta a todas las demandas del negocio del deporte.

La apuesta hoy es la tecnología

Como en todas las empresas e industrias, hoy el desafío siempre está del lado de la tecnología. En el caso de este grupo que aglutina a decenas de locales, lo que requieren es un buen software que les permita un acceso en tiempo y en forma al stock. Ya se pueden ver en algunos locales de Sport 78 unos pequeños equipos que tienen los vendedores llamados “colectores de inventarios”. Hicieron la inversión para empezar a testear este software que permite “decirte con exactitud si tenemos lo que alguien está buscando, con el número exacto, y desde el depósito se trae de una forma más rápida”, cuenta Graells. También destinan buena inversión a seguir desarrollando el canal de venta online, porque su crecimiento se aceleró post pandemia, con un consumidor que demanda cada vez más por esa vía.

Respecto de los nuevos modos a nivel mundial de comercializar estos productos, Graells cree que va a haber cambios pero que aún seguirán conviviendo con los usos actuales. Se refiere a lo que sucede, por ejemplo, en las grandes tiendas de Londres sobre Oxford Street donde los productos ya no son exhibidos, sino que las experiencias de consumo tienen otra impronta. En lugar de ver las zapatillas o la indumentaria en las vitrinas, en estas tiendas hay DJ, bailarines y distintos entretenimientos mientras que los vendedores traen los productos que los consumidores piden porque ya los conocen previamente online. “Yo por ahora me quedo con lo actual, que vos puedas ver cada producto, por nuestra idiosincrasia. Porque para comprar online ya está la página”, concluye Graells.

Zapatillas que hasta pueden tener cristales de Swarovski

Para los amantes de los productos de edición limitada, los valores este año rondan los u$s200 para las zapatillas premium. Pero en oferta está una edición de Nike que lleva nada menos que 228 cristales de Swarovski retrorreflectantes individuales creados exclusivamente para este calzado. ¿El costo en Rosario? hoy $89.999 pero estaban a $123.000.

«La industria del calzado necesita planificación y promoción»

Fuente: Página12 ~ El secretario general de la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado participa de una mesa con empresarios del sector, funcionarios y legisladores, que trabaja en un proyecto de ley de promoción que será presentada en los próximos meses. 

Agustín Amicone transita su cuarto mandato como secretario general de la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado de la República Argentina. Junto con un grupo de empresarios del sector, avalados por la Cámara de la Industria del Calzado (CIC) que lidera Alberto Sellaro, con el apoyo técnico del ministerio de Producción de la provincia y el impulso de la diputada nacional Constanza Alonso, impulsa un régimen de promoción de la industria del calzado. Mientras trabajan en los últimos detalles, previos a la presentación, Amicone analiza la evolución de la industria en las últimas décadas, su transnacionalización y deslocalización, y las posibilidades de convertir a Argentina en un jugador que no compita sólo por precio

En los próximos meses, habrá una presentación detallada del proyecto de ley, pero Amicone adelanta a Buenos Aires/12 que la iniciativa incluye un registro de importadores, la sustitución gradual de calzado por componentes y de componentes importados por nacionales, una política de precios para el mercado local y la creación de un instituto. «Lo más destacable es que acá hay un proceso de trabajo sistemático, de trabajadores y empresarios, sectores público y privado, en defensa del trabajo argentino», dice el gremialista que, en ese sentido, espera que el régimen de promoción pondría a la industria mínimamente a salvo de una hipotética «nueva ola importadora y desindustrializadora», como la del período 2016-2019.

–¿Qué pasó con la industria del calzado en los últimos años?

–Lo que ocurre es que, en las últimas décadas, la industria del calzado se transformó, por una serie de factores, que van de los vaivenes políticos y macroeconómicos del país a tendencias globales de moda y consumo. Antes se usaba un calzado de vestir, en el caso de las mujeres, con taco, en el caso de los hombres con puntera y contrafuerte, que era intensivo en mano de obra y requería una alta calificación de los trabajadores. Eso fue cambiando, ahora se usan otro tipo de zapatos, que tienen una vida útil de dos o tres años. Aquellos zapatos, se hacían en talleres, ubicados mayormente en Lomas, Lanús, Avellaneda, San Martín, La Matanza, y se apalancaban en la enorme cantidad y calidad de cuero vacuno disponible, porque Argentina faena más de 10 millones de cabezas anuales. Esa industria del calzado, la del siglo pasado, no desapareció, pero se redujo mucho y resiste. Hoy, la cadena del cuero exporta mil millones de dólares anuales. Con trabajo, planificación y desarrollo, podría exportar mucho más, para un público global exigente y de ingresos altos.

–¿Pero la tendencia global es otra?

–En el mundo, las preferencias fueron para el lado del calzado deportivo y ese calzado lo producen jugadores globales, que deciden en qué lugar del mundo ensamblar sus componentes donde encuentran el costo más bajo. Nosotros tuvimos un estallido en 2001 y en los años siguientes necesitábamos desesperadamente empleo. Entonces, entre 2004 y 2007 aproximadamente, aparecieron las primeras ensambladoras, que demandan más empleo porque son más grandes, pero comparativamente menos calificados y peor pagos. Entre nada y eso, en su momento nos aferramos a eso, porque mi teoría es que, con empleo, uno discute salario, condiciones, convenio, lo que quiera. Pero sin empleo, no discute nada. O discute miseria. Por eso, creemos que es el momento de pegar un salto, de pasar del ensamblado a la fabricación, cada vez con más componentes nacionales. Ya tenemos capacidad instalada en Chivilcoy, Las Flores y Coronel Suárez, por ejemplo.

–¿Y cómo incidiría este régimen de promoción que uds. plantean?

–En la Argentina posterior a 1976 hubo momentos de crecimiento industrial y momentos de contracción y pérdida de empleo. Pero nunca más hubo planificación industrial y la industria necesita planificación y promoción. Puma, en los años setenta llegó a integrar un 90% de componentes nacionales. Hoy, llegar a 50 y 50, como plantea el proyecto, es un objetivo muy razonable. Pero para eso hay que compatibilizar intereses, que es lo que venimos haciendo en nuestro sector. La ley es la garantía mínima de continuidad para la actividad de nuestro sector.

–¿Lograron un acuerdo entre capital y trabajo?

–Claro, porque tenemos intereses similares. Nuestro objetivo es que haya empleo y para eso hay que fabricar calzado. El interés de Juan Recce (N de la R: el titular de la firma Bicontinent.ar) y sus socios es producir, porque no están detrás de un negocio financiero. Ese es el espíritu que necesita una burguesía nacional. No cualquiera reúne inversores, arma un pool, toma riesgos. Por eso creo que merecemos un trato más generoso por parte del Estado y rescato el compromiso del ministro de Producción, Augusto Costa, y de la diputada Constanza Alonso. Porque ni Recce ni ningún empresario argentino tiene la misma espalda financiera que una marca internacional, con la que se tiene que sentar a negociar condiciones, cuotas de producción, precios, números. Cuando cierra una fábrica es un drama, un duelo. Frente a eso, nadie se salva solo. Por eso este régimen.

–Nombraste tres localidades del interior bonaerense: Chivilcoy, Las Flores y Coronel Suárez. ¿esta industria puede ser un factor de desarrollo de ciudades pequeñas?

–Eduardo Bachelián, el dueño de Gatic, que en su momento fabricaba Adidas, llegó a tener una fábrica en Huanguelén, una localidad de 5 mil habitantes en el centro oeste de la provincia. Hay una percepción compartida por los empresarios: cuando se alejan del conurbano, la tradición sindical es menor y eso les evita o les reduce determinadas tensiones y les permite vivir más tranquilos, aún cuando el salario sea el mismo. No me atrevo a asegurar que tenga una incidencia demográfica, pero puede ocurrir algo de eso en el mediano plazo

Paco Rabanne, su impronta desde la perspectiva argentina

Fuente: La Nación ~ El fallecimiento del diseñador español despierta las reflexiones y recuerdos en referentes de la moda local.

“Para la mujer argentina Paco Rabanne era difícil”, asegura Felisa Pinto. Cuando la periodista de moda que marcó un estilo en los años 60, desde la primera fila frente a la pasarela, vio la propuesta de Paco Rabanne, sintió y escribió que estaba ante algo diferente, un aspecto futurista para mujeres que parecían habitantes de otro planeta recién aterrizadas en una nave espacial. “Yo transmitía exactamente lo que percibía desde mi formación cultural sólida y mi espíritu romántico. Por este último, me costaba asimilar la moda de Rabanne y le di poca bolilla; me pareció que era una aventura más y que no iba a durar nada. Bueno, gracias a sus perfumes duró bastante y se hizo millonario, no por su ropa”, reconoce Pinto y confiesa que extraña horrores su frasco de Calandre, la única fragancia que usó por años.

Al consultarla por el reciente fallecimiento del diseñador español, lo primero que dice es: “Hace 40 años que no lo veo”. Felisa Pinto lo conoció en 1966, una época en la que la escena de la alta costura estaba protagonizada por Yves Saint Laurent y Christian Dior. “Rabanne irrumpió con algo que era el polo opuesto -explica-. Quiso imponer una estética de ciencia ficción, trabajaba la indumentaria como si fuera diseño industrial y desde una perspectiva modernista. Era un tipo muy inteligente y dueño de esa chispa española que le daba una gracia sin igual”, recuerda la autora de “Chic, memorias eclécticas”.

Paco Rabanne tuvo un estilo muy definido durante su trayectoria
Paco Rabanne tuvo un estilo muy definido durante su trayectoria@juliendossena

El mismo comentario sobre la personalidad de Paco Rabanne hace el modisto Gino Bogani, quien estuvo en más de una oportunidad junto a él. La primera vez fue cuando ambos presentaron sus colecciones en el Congreso Internacional de la Moda en Cuba, junto a Pucci y Giani Versace. Había viajado junto a su mannequin Mora Furtado en el el año 1986.

Luego coincidieron en distintos desfiles y compartieron comidas durante las visitas de Paco a Buenos Aires, en restaurantes y también en la mesa de Mirtha Legrand. “Era un hombre muy simpático, muy español -dice Gino-. A mí, cuando la originalidad no embellece, no me parece interesante. Pero lo que hacía Rabanne era completamente nuevo y a la vez sentador. Una moda divertida y, sobre todo, completamente coherente con todo el movimiento social y cultural de ese momento”. Y agrega: “Siempre miré con admiración su trabajo, aun cuando no tenía nada que ver con mi estilo. Indudablemente fue único como diseñador”.

Evangelina Bomparola remonta a su infancia y cuenta que era muy chiquita cuando su abuela le señalaba el quién es quién en la moda. Recuerda la impresión que le causaba Paco Rabanne: “es un chiflado”, pensó al enterarse de que él decía hablar con los extraterrestres y alucinaba con la idea de que desde el futuro le traían esas figuras plateadas que formaban vestidos con espejos. “Cuando en abril del año pasado vi su local de nuevo floreciente en París, el de Avenue Montaigne, encontré en sus percheros esos vestidos emblemáticos de escamas plateadas, lentejuelas y carteras con chapitas en un revival que era muy acorde al tiempo actual”, dice Evangelina en conversación desde Francia, a punto de participar en la nueva edición de Première Vision Paris. “Paco Rabanne representó en mí y en mi generación de diseñadores la idea de innovación, ese impulso a romper estructuras. Hizo un aporte invalorable a la moda”, rescata.

Andrea Saltzman, catedrática de diseño de indumentaria, puntualiza al respecto de esta contribución: “Rabanne fue capaz de hibridar un nuevo lenguaje, de reflexionar con sus creaciones acerca de la materialidad como parte de una cultura y de un tiempo determinados. Lo interesante es que no se separó del arte y el campo estético sino que creó a partir de allí y lo volvió accesible”. Acerca del espíritu futurista de Paco Rabanne, Saltzman apunta: “Las formas de los visionarios anticipan el futuro pero ponen en el presente lo que es propio de ese tiempo. Rabanne la tecnología y posibilidad de configuración disponibles (como los plásticos, el metal) y los llevó a otro plano, sin repetir lo ya hecho sino descubriendo su potencial aún no explorado”.

Paco Rabanne jugó con la intersección de la manufactura en acabados de apariencia industrial
Paco Rabanne jugó con la intersección de la manufactura en acabados de apariencia industrial

Paco Rabanne transgredió límites de disciplinas. Marcelo Marino, historiador del arte especializado en moda y autor de “Eva frente al espejo”, analiza su vínculo con las expresiones en la región: “Su interés por las geometrías y la manufactura puso a este diseñador en diálogo con las artes en general y con una comunidad de artistas donde van a insertarse argentinos como Julio Le Parc, con quien tuvo vínculo, y con la galerista Denise René quien reunió a artistas latinoamericanos del arte óptico y cinético. Rabanne se emparenta con estas líneas, además de en las formas y materiales, en las piezas manufacturadas y suma la habilidad de ver en estas geometrías, a priori a contrapelo con el cuerpo, la posibilidad de participar en lo orgánico”.

Empezó vendiendo calzado femenino en Palermo y pudo expandirse regionalmente

Fuente: A24 ~ Luz Príncipe diseñó su propia marca en momentos turbulentos de la economía. Cómo hizo para embellecer unas ojotas y, tiempo más tarde, poder agrandar el negocio.

Diseña zapatos con la marca que lleva su mismo nombre. Y si hay que empezar a contar la historia del éxito, es necesario remontarse al inicio: en el cumpleaños de un familiar.

Corría el año 2000 y el país padecía una fuerte recesión.

“Cobraba con bastante desfasaje mi sueldo en Radio Nacional. Allí hacía locución y producción periodística, mi primera vocación. Apenas me alcanzaba para comprarle unas humildes ojotas a mi cuñada. Eran tan espantosas que me dio vergüenza y empecé a aplicarles galones, piedras y cintas para embellecerlas un poco”, cuenta Luz Príncipe, diseñadora de su propia marca.

Embellecer el producto

“El procedimiento de embellecerlas dio resultado porque el día que se las entregué a las amigas de mi cuñada se fascinaron tanto con el par de ojotas mejoradas que me preguntaron si podía prepararles otras a ellas. Obvio que conteste que sí. Y terminé confeccionando 300 pares sólo en ese verano”, sigue.

“Mis primeros pasos fueron intuitivos. Sabía que me gustaba mucho hacer zapatos. Al principio sólo ojotas. Pero en aquel entonces todavía seguía con mi trabajo en la radio y sólo podía dedicarme los fines de semana. En esa instancia surgió un fenómeno social que fue clave para el emprendimiento. Era el boom de las ferias de Palermo, y tuve la suerte de agarrarlas desde el principio”, relata.

Y agrega: “Fue una época de crisis en la que la gente se agarraba de lo que tenía más a mano para sobrevivir. Allí, tuve un segundo gran acierto que fue armar un mailing con todos los compradores y curiosos que domingo a domingo se acercaban a nuestro stand en Plaza Serrano”, recuerda.

“Hoy tal vez pueda parecer una obviedad, pero en ese momento -2000/01- la herramienta del newsletter no estaba del todo divulgada, y la fui desarrollando a pura intuición. A cada persona que me compraba le pedía su mail. Y así fui armando una lista de clientes a los que les enviaba las novedades y les avisaba en qué feria iba a estar ese fin de semana”, suma.

El newsletter fue sofisticándose cada vez más, con fotos y textos específicos que buscaban la complicidad del destinatario. Hoy mantiene clientes de aquella época de misivas digitales.

Quince años después de aquel momento, Luz Príncipe se convirtió en una marca reconocida en el exquisito mundo de los zapatos de autor, aquellos que combinan toque personal con atención a la moda, más allá de que la emprendedora prefiera la denominación “zapatos de edición limitada”.

Así busca adecuarse a más a su estilo y filosofía.

Cultura de negocios

El emprendimiento cuenta con un taller propio, sus diseños ya traspasan fronteras después de una experiencia muy positiva en Europa. También en Latinoamérica porque lograron exportar a varios países.

“Por ejemplo, cuando desembarcamos en Venezuela, hay una industria de Miss Universo y creo que les atrae mis colecciones porque apuntan a algo bien clásico, aunque audaz con los colores. Nuestra línea es clásica. Usamos una moldería básica porque la mujer de hoy es funcional, hace muchas actividades y por ende necesita algo cómodo”, señala.

Y avanza: “Las plataformas de 15 centímetros o los tacos de gamuza pueden ser divinos en un desfile o en una exposición. Pero no los lleves a la calle o al trabajo porque la vereda o el roce con el pedal del auto los destroza”.

Siendo hoy una marca hija de la mayor crisis que tuvo nuestro país, Luz Príncipe no tiene miedo de hipotéticas turbulencias a producirse en el futuro.

“Si esto salió de un momento cuando las cosas no estaban bien económicamente: ¿Cómo no me voy a adaptar a una situación peor? No quiero un emporio. Quiero sentirme orgullosa de mi trabajo. Ser artesanal en el detalle y rigurosa en la terminación final”, finaliza.

Altas expectativas de negocios en EFICA 107

@clarisshoes salvamemaria.ok @saveriodiricci @eficaok

Fuente: Info Calzado – Con mucho éxito y alta expectativas de negocios concluyó la primera exposición del año, EFICA 107 convocó a la industria para compartir las novedades de la próxima temporada.

Más de 80 empresas presentaron las tendencias Otoño / invierno 2023 en los pabellones 2 y 3 (aprox 10.000 m2) del Centro Costa Salguero de la Ciudad de Buenos Aires.

Durantes 3 intensos días de trabajo los visitantes pudieron ver y conversar en forma directa con los fabricantes nacionales del calzado argentino, incluso esta edición contó con área de Calzado de alta gama

Entre otros conversamos con Ariel Soriano de Claris Shoes, con más de 60 años de historia, fabrican zapatos confort para mujer con alta penetración del mercado abasteciendo a todo el país. 

Participan en Efica desde hace más de 35 años de forma ininterrumpida, comentan que  fue una buena temporada de verano y la de otoño invierno arranca muy bien. Hay otro entusiasmo superada la pandemia. Muy positivo respecto al 2023!

Nicolas Puch de Mistral, licenciatarios de la línea de calzado de la marca desde 2019, se presentan con una colección grande (post pandemia). En Efica contactan en forma directa a todas las zapaterías del país concretando buenos negocios.

Por otra parte, dada la situación respecto a las importaciones, nos comenta que se han acercado varias marcas buscando fabricantes nacionales para delegar la producción de calzado que antes se importaba en forma directa.

Respecto a Efica siempre bien, el primer dia superó todas las expectativas, de hecho el primer dìa (Domingo, fue muy bueno) 

Por otra parte Diego Pica, fabricantes de calzado principalmente en cuero, tanto para su marca propia Slavame María como para terceros, comenta que el sector está levantando y esperan una buena temporada

Más de 5 meses llevó la preparación de la temporada que están presentando en la expo con muy buena aceptación de los visitantes. Respecto al 2023 se muestra expectante considerando que el tema importaciones favorece al sector.

Coincide con Soledad Martinez de Saverio di Ricci, quienes con un importante stand, presentaron sus novedades para la temporada venidera. 

Saverio di Ricci cuenta con una trayectoria de más de 40 años en el mercado diseñando para las mujeres argentinas, adaptando los mejores diseños de europa a la mujer argentina. Con una producción estimada de más de 10.000 pares por temporada, mantienen el calzado artesanal con mucho detalle y calidad.

Por último, Hector Correa de Latin Shoes, Licenciatarios de marcas internacionales presentan las líneas que se fabrican en el país apoyados por más de 10 grandes talleres argentinos para poder proveer a todo el país.

Claramente estos testimonios representan el clima de negocios y las expectativas de nuestra industria.

Las actuales regulaciones respecto a las importaciones claramente favorecen al sector, pero no por ello, debemos dejar de tener presente que es una industria que requiere de mucho capital humano dado que todo el proceso requiere mucho desarrollo artesanal…

Efica es organizado por la Cámara de la Industria del Calzado CIC, Felicitaciones y esperamos el encuentro del Inviernos para ver los adelantos de la temporada 2023/24

Colgó su título de abogada y se dedicó a hacer carteras: hoy factura más de $35 millones al año

Fuente: IProfesional ~ Lía Protto pasó de un estudio jurídico a recorrer talleres buscando la mejor calidad para sus productos. En pandemia explotó el negocio y quiere exportar.

En 2007, Lía Protto era abogada y trabajaba en el microcentro con tareas vinculadas a seguros y ART que no le generaban ningún desafío. Pero la creatividad y el diseño siempre fueron parte de su vida. «Trabajaba en un estudio jurídico haciendo cosas que me aburrían y empecé a buscar dónde poner mi creatividad», cuenta a iProfesional.

Si bien tuvo que «estudiar una carrera con salida laboral concreta», a sus 26 años comenzó a hacer un curso en la Escuela Argentina de Moda y en poco tiempo ya estaba diseñando camperas de cuero, billeteras y carteras, lo que daría origen a su marca Trentoya en 2008.

Lía empezó de cero, buscando proveedores, yendo a caminar la calle Boedo por materiales de confección y, si bien hoy la marca funciona de otra manera, al principio era ella haciendo todo. «Ese camino me hizo conocer y aprender muchas cosas sobre el rubro», recuerda.

«En la búsqueda de talleres de confección antes de tener el propio, me metía en cualquier lugar, estaba loca. Mi mamá y mi hermano, que me han acompañado a lugares desconocidos, me miraban y me preguntaban si estaba loca, si iba a entrar a esos lugares. Y sí, para fabricar en Argentina al menos un poco loco tenés que estar«, expresa.

Lía reconoce que su vida anterior, en el mundo de la abogacía, le permitió desarrollar más su personalidad, ser más sociable. «La facultad ayuda mucho y te abre la cabeza, estudies lo que estudies. Además, me tocó trabajar en un lugar donde el dueño del lugar te decía que no importaba cómo, pero que había que conseguirlo, y aprendí -a fuerza de experiencia- que si querés algo, tenés mil maneras de conseguirlo. Si te dicen que no, hay que seguir intentando hasta que salga. Todo ese camino me formó como profesional y me ayudó para después hacer mi camino de forma independiente».

Los primeros obstáculos para producir

«Con respecto a la marca, puedo escribir un libro de los obstáculos para ser emprendedor en Argentina, y no hablo solamente de la carga impositiva», dice la creadora de Tentroya.

Lía empezó buscando proveedores y yendo a caminar la calle Boedo por materiales de confección

En primer lugar, se refiere a la falta de profesionalización de la actividad. «Recorría talleres buscando alguien que quisiera hacer algo distinto, la mayoría de los modelistas (que son los que hacen el primer prototipo del producto) cuando ven que es algo diferente de lo que se hace habitualmente, te dicen que no se puede», cuenta.

«Insistís para que lo hagan, para que le pongan cabeza y laburo, tratás de contagiarlos de tu visión, pero mucha gente elige seguir haciendo bolsos básicos y lo entendés porque económicamente es lo que más les conviene», se lamenta.

Luego, narra que al momento de fabricarlos «toca la frustración de recibir productos que esperaste por dos meses y llegan todos mal hechos, mal cosidos, manchados, con los materiales arruinados».

Ahora Lía lo toma como parte del proceso, pero las primeras veces era tremendo. «Una cartera que habías imaginado 6 meses atrás, que le habías comprado los materiales y conseguido el taller, te llega destruida, mal cosida, mal armada, manchada, y el cuero, una vez que se cose. queda marcado y no tiene solución, tenés que volver a comprar el cuero y volver a producirlo».

La joven analiza la actualidad del rubro: «El hecho de que no haya un plan sostenido para el crecimiento de la industria hace que sea muy informal. Muchas veces los talleres constan de 2 personas que son familiares y trabajan en el fondo de su casa, con la pequeña máquina que se pudieron comprar. No apuestan a crecer porque ya tuvieron una mala experiencia, entonces en lugar de trabajar con 2 o 3 tenes que buscar 20 para poder sacar una producción o armar un equipo propio».

Por otro lado, sigue, «los cueros que se exportan son los de primera calidad y los que quedan acá son los rechazos de exportación, por lo que partís desde atrás con respecto a marcas internacionales. Y lo mismo te pasa con los herrajes, acá te adaptás a lo que hay, no a lo que vos querés o a lo que el diseño lleva».

Como próximos pasos, Lía quiere llevar sus productos a otros mercados

Sumado a ello, «cuando se cierran las importaciones, los insumos no se consiguen y eso perjudica a todos. Nunca llegás a competir con marcas internacionales porque no tenés los insumos. Hay un herraje que yo uso que lo compré en China. Acá no se consigue. Lo quise fabricar, pero no lo fabrican porque no tienen la máquina y no quieren invertir en eso por miedo».

No obstante estos temas, la emprendedora plantea: «Argentina es increíble y puede crecer con su industria, tenemos muy buenas ideas y buena gente, pero necesitamos contar con un plan que ayude a que esto ocurra. Si queremos competir con marcas en serio, tenemos que tener con qué. ¿Saben lo que crecerían las fábricas si contáramos con algún tipo de colaboración? Facilidades para contratar, acceso al crédito, acceso a los insumos», enumera.

Los números del negocio

Tentroya comenzó con una inversión de u$s3.000. «Empezamos haciendo indumentaria de cuero y después fuimos sumando accesorios y carteras», cuenta Lía. «Hoy estamos en una venta que ronda los 100 productos mensuales y una facturación promedio de $3 millones mensuales».

Sobre cómo ha ido evolucionando el negocio, «fue en sintonía con mi propia evolución como emprendedora», dice. «Arrancamos vendiendo a conocidos y amigos de amigos. Cuando empezamos a crecer, incursionamos en el mundo del marketing, prensa, branding, y la marca fue de a poco creciendo. A la gente le iba gustando y llegamos a tener dos locales, uno en Posadas y Rodriguez Peña y el otro en Galerías Pacifico».

El primero tuvo que cerrarlo por la situación económica y luego de la pandemia, el otro. «Fueron tiempos de mucho miedo porque creí que iba a tener que cerrar la empresa», recuerda la emprendedora.

Actualmente, la marca se vende solo a través del canal on line. «Modalidad que explotó con la pandemia y ahora sigue creciendo. La facturación superó las expectativas. La clave del éxito estuvo en la tenacidad del equipo y en la readaptación que transitamos en todo este corto plazo. Es algo que caracteriza a todo emprendedor argentino», manifiesta.

Tentroya comenzó con una inversión de u$s3.000

Y sigue: «Estoy convencida de que es el camino; invertir para que el canal sea cada día una mejor experiencia para el cliente y para el usuario, la forma de llegar a más personas. Con un local llegás a la gente de la zona mientras que teniendo una tienda on line llegás a todos los rincones del país».

«Si bien me encantan los locales físicos y creo que esta bueno que la marca tenga una tienda física, creo que el canal online hoy nos da la posibilidad a nosotros como empresarios de llegar a lugares que no llegaríamos y a los clientes de acceder a productos que no estan en la zona en la que ellos viven y recibirlos de la misma manera que los recibe una persona en CABA», cuenta.

Con el diario del lunes, «creo que todo lo que vivimos fue un aprendizaje y no me arrepiento del camino recorrido, por supuesto que puedo encontrar muchas cosas que haría mejor, pero siento que no tendría la experiencia ni el aprendizaje que tengo ahora», reflexiona.

Si volviera el tiempo atrás, la joven tal vez apostaría muchos más recursos al canal online. «Creo que no tiene techo y las posibilidades que ofrece son infinitas», plantea.

«No dejaría de tener local, pero siempre portando fuerte al crecimiento online. Por otro lado, armaría más equipo. A veces uno cree que puede hacer todo solo y muchas veces me terminé agobiando. Siempre las cosas que se hacen en equipo terminan siendo mejor».

En términos de balance, dice: «El aprendizaje que nos dejaron esto últimos 2 años es la posibilidad de reinventarnos. Cuando algo pasa que te sorprende y te saca de tu zona de confort, tener la capacidad y la disposición para adaptarte es muy importante, y creo que eso en la Pyme es mucho más sencillo que en una empresa grande».

La empresa que fundó Lía nació en 2008

Como próximos pasos, Lía quiere llegar a otros mercados. «Buscamos crecer dentro del país aumentando la facturación y no descartamos la idea de abrir un nuevo local, pero también buscamos crecer en fabricación nacional para poder exportar al resto del mundo y lograr que nuestros productos lleguen a todos lados».

Actualmente, la marca está con un proyecto de expansión a Estado Unidos bastante encaminado. «Contamos con un depósito allá y sistema de distribución, queremos crecer en ese mercado y después lograr nuevos, siempre abastecidos desde Argentina», concluye.

Las sandalias de la diseñadora de Santa Cruz Mercedes Saravia llegarán a Riyadh, Qatar y Dubai

Fuente: La Opinión Austral ~ Tras su participación en el Congreso Internacional de Emprendedorismo en Arabia Saudita, a la diseñadora de indumentaria, calzado y accesorios sustentables de Piedra Buena se le abrieron nuevas posibilidades en el mercado de Arabia Saudita y con Inditex. «Son proyectos re lindos y seguimos avanzando», expresó a La Opinión Austral.

En marzo, la santacruceña participó en el Congreso Internacional de Emprendedorismo que se realizó en RiyadhArabia Saudita. «Había llevado lo que había quedado de la producción del verano, tenía un buen muestrario de sandalias de mujer y las muestras de sandalias de hombre de las que había hecho muy poco porque era la primera vez que hacía ese calzado y lo estaba probando. Les encantó. Los árabes están todo el año con 25 – 30° y no usan calzado cerrado. Estaban fascinados, porque era algo más de diseño y no lo típico artesanal», relató a La Opinión Austral Sandalias para hombre y para mujer, diseñadas por la santacruceña.Sandalias para hombre y para mujer, diseñadas por la santacruceña.

«Logré dar con dos firmas de Arabia Saudita que se están creando. La idea es sumar las sandalias para hombres en las colecciones de indumentaria que ellos van a comercializar, abrirán una cadena de locales en RiyadhQatar y Dubai, las ciudades importantes de Arabia Saudita», precisó.

Además, tomó contacto con Inditex, grupo de empresas de modas, entre ellas Zara y Massimo Dutti. «Zara Home mueve mucho volumen de producción, tiene varias marcas que trabajan cuero y están muy preocupados con qué hacer con los descartes de cuero que se generan en el proceso productivo, como después con productos terminados fallados o no vendidos». Saravia junto al empresario Sulaiman en la ciudad de Riad.Saravia junto al empresario Sulaiman en la ciudad de Riad.

En este sentido, Saravia se encuentra trabajando con el equipo de diseño viendo la posibilidad de que puedan incorporar algo de la técnica que la santacruceña utiliza en sus productos y tener una línea de cuero reciclado.

El equipo de diseño se divide entre Alicante, Sanghai y Argentina. «Son proyectos re lindos y seguimos avanzando», señaló.

Por otra parte, respecto a la participación en la New York Fashion Week 2023, señaló: «En 2022 quedé seleccionada pero me enteré muy sobre la fecha».

«Fashion Designers of Latinoamerica financia un show para presentar a diseñadores de Latinoamérica, pero además de estar seleccionado y en competencia, tenés que pagar gastos mínimos de pasarela que parten de los 1.500 a 5 mil dólares», comentó.

En este marco, ante los costos y la tramitación de la visa, en caso de no poder viajar, Saravia igualmente enviará sus diseños.

Las ojotas de Messi: quién es el emprendedor que se las regaló al 10

Fuente: Cronista ~ Nacida en plena pandemia, Bagunza creó el calzado que se le vio puesto al capitán del seleccionado. Tras conocerse la imagen, agotaron stock.

«Hola, Luciano, ¿todo bien? Soy Leo. Quería agradecerte las ojotas que me mandaste. Están buenísimas y la caja espectacular también». Ese fue el mensaje que el 6 de diciembre de 2021 recibió Luciano Gianzi en el inbox de la cuenta de Instagram de Bagunza, empresa familiar fabricante de calzado. ¿El remitente?, nada más ni nada menos que el capitán del seleccionado argentino Lionel Messi, a quien le habían alcanzado una caja con un par de ojotas que habían hecho para homenajearlo tras la Copa América en Brasil.

Nacida en plena pandemia, Bagunza fue creada por la familia Gianzi. Hasta entonces, el negocio familiar estaba relacionado con la provisión de insumos para fabricar calzado. Allí se vendían bases para ojotas, capelladas y tintas para serigrafía, entre otros.

«En la pandemia decidimos crear nuestra propia marca de productos terminados. Empezamos a diseñar el calzado y lo vendíamos online», cuenta Gianzi.

El emprendedor recuerda que tras la final de la Copa América que la Argentina le ganó a Brasil en el estadio Maracaná, se les ocurrió hacer una ojota en homenaje a Messi. Pero no solo la pondrían en venta en sus canales habituales, sino que harían el intento de hacérsela llegar al 10 de la selección.

Empezaron a buscar contactos posibles y todos los caminos conducían al mediocampista del Atlético de Madrid y del seleccionado Rodrigo de Paul. Finalmente, consiguieron hablar con un amigo de una tía del ex Racing, a quien le podían hacer llegar el regalo durante el partido de eliminatorias entre la Argentina y Brasil en noviembre del año pasado.

«Mandamos dos cajas. Una con el número 7 de la camiseta de De Paul y otra con el 10 de Messi. Nuestro conocido nos llamó enseguida. Le habían mandado una foto de las ojotas a De Paul y él había respondido que le habían encantado, que se las acercáramos a Ezeiza, así que allí fuimos», contó.

Después de eso fue el momento de esperar. La respuesta llegó al día siguiente, de la mano de la tía de De Paul. Tanto al mediocampista como a Messi les había gustado el regalo.

Pero la sorpresa mayor llegó el 6 de diciembre de 2021. Ese día Gianzi se encontró con una notificación que le indicaba que nada menos que Leo Messi le había mandado un mensaje. Ahí el 10 no solo le agradecía el regalo, sino que, además, le encargaba ojotas para sus tres hijos, Tiago, Mateo y Ciro, y para su mujer, Antonela Roccuzzo.

Euforia

«Cuando recibimos ese mensaje no lo podíamos creer. Empezamos a saltar y nos abrazábamos de felicidad con mis hermanos«, agrega Gianzi.

Sin embargo, y pese a lo que les decían sus amigos y conocidos, los Gianzi decidieron mantener en reserva este mensaje. Más allá del pedido para la familia, no tenían ninguna prueba de que las usara. Pero eso cambió cuando el 10 publicó una foto en su casa en la que tenía puestas las ojotas de Bagunza.

«La incógnita era qué ojotas usaba Messi. Decían que eran de La Salada y nosotros salimos a mostrar que son las que hacemos en Bagunza. Ahí empezó la locura», dice Gianzi.

Agotado

Desde el miércoles que se conoció el mensaje en el que Messi agradecía las ojotas y pedía más para su familia, las ventas explotaron. Solo en una noche se vendieron 3000 pares de ojotas, lo que equivale a la producción de un mes, y en la tienda online tuvieron que colgarles el cartel de «agotado».

«Con el Mundial estuvimos vendiendo mucho este modelo, pero lo de esta semana fue inesperado. Tenemos capacidad de producción, pero no la estábamos usando al máximo. Ahora tenemos que redoblar esfuerzos y contratar más gente para poder responder a la demanda. Calculo que entre martes y miércoles de la semana próxima tendremos disponibilidad nuevamente», señala el emprendedor.

El boom causado por el 10 hizo que se tuvieran que cambiar las previsiones para 2023. Ahora, esperarán a que pase este pico de ventas para ver en qué número se estabilizan y poder volver a planificar el año.

Crecimiento

Bagunza tiene, también, otros 10 modelos de ojotas y cuatro de zapatillas. La intención era comenzar a fabricar botines en los próximos meses y ver qué otro producto se podía agregar al portafolio. Asimismo, continúan con el negocio de venta de insumos.

«Para nosotros lo que pasó esta semana fue como un sueño. Solo nos queda conocer a Leo en persona y confiamos en que va a pasar más pronto que tarde», cierra.

“Las zapatillas que salen de la fábrica, cuestan bastante menos que lo que se vende”

Fuente: La Razón de Chivilcoy ~ Juan Recce, presidente de la fábrica Calzado Bicontinentar, que funciona en el predio de la anterior Paquetá en el parque Industrial de Chivilcoy, fue entrevistado en el programa “Detector de Mentiras de Crónica HD” sobre el impacto de las medidas de Precios Justos en el rubro.

Vale destacar que el gobierno nacional acordó una rebaja del 15 por ciento del precio del calzado con las empresas y hasta marzo o abril, un aumento del 3 por ciento.

Mesa de trabajo

Al preguntarle a Recce sobre la viabilidad del acuerdo, respondió: “En principio se hizo una mesa de trabajo que duró varias semanas para analizar de punta a punta toda la cadena de costos. Nosotros estamos en el inicio de la cadena de costos, vendemos zapatillas a costo industrial a las marcas y éstas, después, se encargan de distribuirlas en los puntos de comercialización”.

Recce recordó que en la fábrica de Chivilcoy se trabaja para empresas como Armour, Le Coq Sportif, New Balance, Diadora, Asics, Montagne, 47 Street, Lacomb, entre otras. “Nuestra empresa abrió en el 2007, cerró en el 2018 y la reabrimos hace un año y medio. Arrancamos de a poco, con una línea de producción y ahora tenemos doce”.

Contexto del cierre

Respecto al cierre de Paquetá en 2018, Recce indicó: “Intervinieron muchos factores. En 2015 había un mercado de 3.2 pares de calzado por cada habitante y de 35 millones de pares de calzado deportivo, que es nuestro segmento. En ese momento fabricábamos más o menos el 11 por ciento del calzado deportivo para todo el país, más de 3 millones de pares por año”.

“En el 2019, ese mercado se deprimió a 22 millones de pares. Hay un estudio muy interesante de la Comisión Nacional de Comercio Exterior que muestra distintos datos en el tiempo, uno de ellos el consumo de pares de calzado. De 3.2 bajó a 2.5 pares por habitante y los precios por la importación abierta no bajaron”.

“Ahora estamos en el sendero contrario. Mayor oferta, mayor industrialización porque, cuando reabrimos, pasamos de 10 empleados a 550 y lo mismo pasó en Misiones, La Rioja, Catamarca, Las Flores, Coronel Suárez, que es la geografía nacional del calzado deportivo”.

“El mejor año del calzado deportivo fue en el 2016, porque los pedidos son con un año de anticipación. Cuando arrancó el gobierno (de Macri) en el 2015, todo lo que era licencias de importación se aprobó en simultáneo, insumos y producto terminado”.

“2016 fue un año de mucha producción y de mucho stock. En 2017 todos los depósitos de las marcas estaban saturados, porque les habían aprobado todo lo terminado y nosotros habíamos producido para un año de mucha demanda esperada. 2017 fue un año de merma de pedidos y 2018 de cancelación, así que las empresas tuvieron que afrontar los retiros voluntarios”.

“Nosotros hicimos retiros voluntarios para 650 trabajadores y cuando tuvimos la oportunidad reabrimos, convocamos a la gente y muchos pudieron volver”.

Distorsión de valores

El presidente de Bicontinentar enfatizó que esa recomposición, “reordenó el mercado” aunque aclaró que “las zapatillas que salen de la fábrica, cuestan bastante menos que lo que se le vende al público, entonces, en ese proceso de distorsión de valores que se van agregando, se acordó este 15 por ciento que era razonable para la mayoría de las empresas, de segmentos de media y baja gama tecnológica”.

“Como productor de calzado asumimos un compromiso antes de este acuerdo, cuando hacíamos la estructura de costos, que aumentábamos el costo del producto por paritaria de nuestros trabajadores”.

Posteriormente, Recce agregó que hay mucha incidencia de mano laboral en el calzado. “Cuanto más tecnológica es, menos incidencia hay, pero es una de las industrias que emplea más mano de obra, incluso en China, la mayoría de las operaciones de terminación del calzado, involucran robots manejados por personas”.

Tuvo que demostrar que no solo era «hija de» y ahora lidera una importante empresa de zapatillas

Fuente: Cronista – Se recibió de médica pero dio un volantazo y se sumó, de cero, a la empresa fundada por su padre. Cuáles fueron los prejuicios que tuvo que superar y cuáles son los desafíos que todavía perduran.

Cuatrocientas personas, 4000 pares por día, 43 años en el mercado. Esos son algunos de los números de la fabricante nacional de zapatillas John Foos.

Menos simple es describir la trayectoria profesional de María José Fosati, quien hoy es la directora general de la empresa y trabaja mano a mano con su padre, Miguel Ángel Fosati, presidente de la firma.

La empresaria cuenta que creció rodeada de zapatillas y que, ya mientras cursaba el colegio secundario, trabajaba de vendedora para la firma familiar. Posteriormente, fue encargada y visitaba mucho la fábrica. Contagiada por la pasión de su padre por el negocio, luego fue pasando por distintas posiciones, incluida la de cadete. Mientras trabajaba, estudiaba Medicina y, ante la afirmación de su padre de que no dedicaba las horas suficientes al estudio, decidió amalgamar sus dos vocaciones y montó una enfermería en la planta.

Ya recibida de médica, abrió su consultorio y hoy dice que fue su primera experiencia como emprendedora. Durante tres años, se dedicó a esa profesión y a la docencia, pero -cuenta- se conectó con su necesidad de volver a la fábrica, puso llave al consultorio y «pegó un volantazo» para dedicarse 100 por ciento a la compañía de su padre.

«Tuvimos una reunión familiar y anuncié que iba a capacitarme en gestión de PyMEs y marketing digital. Empecé en la empresa de cero: ingresaba a las 5:30 o 6 de la mañana y hacía recorridos por todos los sectores«. Esa rutina duró aproximadamente un año, precisa. «Para mí fue un doble desafío: por un lado, ser mujer en un medio muy masculino y, por otro, demostrar que no estaba ahí por ser ‘hija de'».

El esfuerzo valió la pena, porque se llevó aprendizajes de todas las áreas por donde pasó y, cuenta, hoy sigue haciendo «apariciones aleatorias» a primera hora de la mañana, en distintos sectores de la fábrica.

El predominio masculino no se verifica solo en la empresa. «En la Cámara del Calzado, la mayoría son hombres», ilustra.

La pandemia fue un momento crítico para la empresa, pero en los últimos años, con las restricciones a las importaciones, se vieron favorecidos y ampliaron su capacidad, incorporando tanto maquinaria, como mano de obra. Esto último, sin embargo, fue dificultoso, porque la crisis de la industria del calzado hizo desaparecer algunos oficios, por lo que también debieron invertir en capacitación. También hay un contexto que promueve el andar más ligero. «Todo lo que nos ha atravesado en la pandemia nos puso en un lugar de querer ir más cómodos en la vida. Hoy, la zapatilla no puede faltar en la indumentaria. Eso nos amplió el target. Usar zapatillas es un mensaje social», asevera.

Para Fosati sigue habiendo desafíos para la mujer. «A mí siempre me resuena en algún momento esa situación, por ejemplo, cuando te sentás a una mesa a discutir una opinión, cuando tenés que mostrar resultados, cuando negocias o cuando viajas», ejemplifica. «A mí me sigue llamando la atención de que en una mesa donde se toman decisiones sigo siendo la única mujer», reconoce.

Respecto de la situación del género en el ámbito corporativo, destaca que la maternidad puede ser un reto. «Yo, por ejemplo, no soy madre todavía. Cuando veo a mis pares que sí lo son pienso cómo hacen, porque yo no doy abasto«, grafica. De todas formas, cree que «estamos logrando empoderarnos». «Es un desafío muy grande, pero hermoso», asegura. Sin embargo, admite que muchas veces las mujeres sienten que tienen que dejar algo de lado.

Esta nota se publicó originalmente en el número 347 de revista Apertura.